Hare Krishna querido devoto,
¡Srila Prabhupada Kijay!
Este es un tema que tardaría mucho en aclararse por completo. Por el momento sólo les ofreceré una reflexión.
No hay límite para cuánto una persona puede desear. Puede tener lo mejor y ser perfectamente feliz, pero la sospecha de que podría haber algo mejor, o al menos diferente para saciar la sed de variedad, siempre está ahí.
El hecho de que la jiva no supiera exactamente que estaba allí en el mundo de Maya es una fuente de gran atracción, especialmente si Krishna no está allí o si su existencia no es invasiva. Queremos ser amos y controlador, y este es un motivo de gran atracción hacia el mundo de las materia.
En cuanto a tu segunda pregunta, es necesario entender cómo es el mundo espiritual. Si continúas estudiando, verás que las diferencias entre los dos mundos son más de naturaleza cualitativa que objetiva. La diferencia entre el mundo material y el mundo espiritual no es que no deba haber lo que hay aquí sino en la gran diferencia de calidad.
Algunos ejemplos: aquí hay personas, ciudades, caminos, lagos, ríos, océanos. Allí también, pero todo es de naturaleza espiritual. Es todo eterno, lleno de felicidad y conoscimiento. Aquí amamos, allá también aman, pero es de carácter espiritual. Aquí deseamos nosotros, allí también desean, pero es de carácter espiritual.
Hare Krishna.
– Manonatha Dasa (ACBSP)
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